Nueva entrada de comida

En Mayo, por el día de la Madre, y hablando de cosas random, mi madre y yo llegamos al tema de los dulces de Jaén, de donde es ella. Así que, ni corta ni perezosa, decidí sorprenderla haciendo unos ochíos, un tipo de bollo "dulce" de allí que ella tomaba para merendar o cenar muchas veces. La primera hornada salió bastante buena, aunque ligeramente más hechos por un lado que por otro (era de esperar, nuestro horno es más viejo ya que la Tarasca). Pero con las medidas de la receta que seguí salió mucha masa y reservamos en el congelador la mitad. Ayer, contando con que ya estaba de vacaciones, la saqué y hoy he hecho la segunda. Y aunque esta vez los he sacado antes para que no se hicieran más de la cuenta, y han quedado mucho más bonitos estéticamente, la conclusión ha sido no volver a congelar la masa. Por mucho que a la gente le gusten las cosas congeladas, y que defiendan que es lo mismo, no lo es. Será que en casa somos más sibaritas a la hora de comer, o lo que sea, pero se notaba una ligera diferencia. Aun así, cayeron todos en dos días XDDD

La receta está sacada de Cocinando entre Olivos, por si alguien se anima ^^

Y ahora, a esperar a ver si el Cádiz sube a Segunda División hoy *nervios nervios*