Música: Let it Go - Idina Menzel
Estado: Muerta de miedo, pero determinada
Nunca he sido una persona valiente. Siempre he preferido sentirme a salvo y mantenerme en esa zona segura que me da tranquilidad y estabilidad: mi casa, mi familia, amigos con los que me llevo bien, un trabajo, aunque no es gran cosa y da bastantes disgustos, mis libros, mis sueños...
Pero siempre, o casi siempre, llega un momento en la vida en que te planteas cosas. A mí me pasó unos años después de empezar a trabajar. Estaba contenta porque tenía un trabajo, pero no feliz, porque en realidad a mí la enseñanza nunca me ha gustado, y sigue sin gustarme. Le tengo que agradecer muchas cosas, porque hizo que tuviera que romper el cascarón de mi timidez y abrirme a la gente. Sigo siendo tímida, y me cuesta confiar en la gente, pero sólo en mi vida personal, de cara al público no tengo más remedio que ser abierta, receptiva y comunicativa.
Decidí que era hora de despertar hace dos años y algo, cuando me metí de cabeza en el postgrado de Traducción, dispuesta a empezar de una vez el camino que siempre he deseado. Desgraciadamente, el fallecimiento de mi padre paró mi marcha, no sólo por el impacto emocional que supuso, sino porque tuve que hacerme cargo de responsabilidades y preocupaciones diversas. Ambas cosas trastocaron mi vida más de lo que os podéis imaginar, me dejaron sin energía para continuar y en algunas ocasiones paracía que el suelo se hundía bajo mis pies.
Hoy en día, aunque las preocupaciones continuan, las cosas están medio encauzadas. Y he comenzado a mirarme de nuevo. Y a ver que sigo estancada en el mismo punto que en el 2011, que los esfuerzos que hice para estudiar y trabajar a la vez no han dado fruto, y que seguirán sin darlo si no hago algo, y no quiero pensar que el dinero y el trabajo que invertí en ello, y los malos ratos que pasé, fueron para nada.
Tras pensarlo durante un tiempo, y hacer algunos planes, hoy me he levantado con la determinación de ponerme en marcha otra vez. Tengo un pellizco en el estómago, y estoy algo nerviosa, pero es hora de volver a tomar las riendas de mi vida y hacer lo que quiero. Y sé que me va a hacer falta mucho valor, porque tengo miedo, os soy sincera. He decidido romper mi zona segura de una vez por todas, y para mí es como estar al borde de un abismo, justo delante de un puente de esos de madera que se ven en las películas y que parece que no va a aguantar si lo cruzo.
Pero es ahora, o nunca.
domingo, 16 de marzo de 2014
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2 comentarios:
¡Muchísimo ánimo con todo lo que te propongas! Ya verás como irá bien ;)
¡Gracias, preciosa! (^3^)~♥
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